Livingstonia es una ciudad situada al norte de Malawi y fue uno de los asentamientos más importantes en la historia del país, porque allí se establecieron los misioneros anglicanos escoceses que buscaban refugio a finales del siglo XIX del paludismo que sufrieron en las aguas del lago Malawi.

Situada a una altura de 1.350 metros de altitud, desde allí puedes gozar de unas vistas fantásticas y aéreas sobre el lago Malawi; y de una meseta con muchas actividades de senderismo a realizar, como la ruta para visitar las cascadas más altas de Malawi o la excursión al Chombe Plateau. Si vas con tu propio vehículo, allí encontrarás también una de las rutas de conducción más espectaculares de Malawi, la Gondori Road, con una carretera de 22 curvas que va de los pies del lago Malawi hasta lo alto de Livingstonia con unos 600 metros de desnivel.

Hoy en día todavía conserva ciertos edificios de la época colonial donde podrás vivir el pasado de la historia misionera de los escoceses que pusieron el nombre de Livingstonia en honor al explorador escocés David Livingstone, que murió años antes de que éstos llegaran.

Pese a encontrarse en el norte del país y lejos de la capital (a unos 430 kilómetros), la visita a Livingstonia es una buena ocasión que no puedes dejar escapar si quieres adentrarte en la naturaleza, ver el contorno de uno de los lagos más grandes de África desde las alturas, desconectar y relajarte en alguno de sus alojamientos e interactuar con la gente local de esta tranquila población.

¿Cómo llegar?

Livingstonia se encuentra ubicada en la parte norte del país, a unos 130 kilómetros de la frontera con Tanzania y en un entorno maravilloso. Situada en las montañas, para llegar tienes principalmente dos opciones:

En primer lugar, puedes llegar a Livingstonia recorriendo una de las carreteras panorámicas más bonitas del país: la S103 o también conocida como Gorodi Road. Esta carretera sale del lado del lago, en la población de Chitimba, y sube con un desnivel de 600 metros y en una carretera secundaria de 22 curvas de piedras y sin asfaltar hasta llegar arriba de Livingstonia. Es uno de los recorridos históricos y míticos del país, aunque se recomienda ir con un vehículo 4×4, o una moto off-road.

Para llegar a Chitimba (donde comienza esta ruta) desde el sur, debes seguir la M1 que sale de Mzuzu, en una carretera de asfalto y relativamente en buen estado. Desde Mzuzu a Chitimba hay unos 130 kilómetros que podrás recorrer en dos horas aproximadamente, y en donde bajarás por un puerto de montaña también muy bonito justo antes de llegar a Chiweta, que se encuentra ya a la misma altura que las aguas del lago Malawi. Si vienes de la frontera con Tanzania (Songwe), debes seguir la principal carretera que transcurre junto al lago unos 130 kilómetros hasta llegar a la población de Chitimba, donde tendrás que desviarte para empezar a conducir por la icónica Gondori Road.

La segunda forma de llegar a Livingstonia es por una carretera nueva, asfaltada y en muy buen estado que va subiendo paulatinamente hasta llegar a los 1.300 metros de altitud donde se encuentra aproximadamente la ciudad. Esta opción es ideal para aquellos que no viajen en vehículos 4×4. Esta ruta limita al oeste con Nyika NP y es una de las opciones más rápidas para llegar a Livingstonia.

Esta carretera la encontrarás justo en la población de Chisokowo, a unos 78 kilómetros al norte de Mzuzu por la M1, donde si vienes del sur tendrás que girar a la izquierda y pasar por encima del puente del río South Rukuru, y conducir durante unos 50 kilómetros hasta llegar a la población de Livingstonia por la T305 y donde pasarás por diferentes poblados como Chiwerewere o Haniniya. Una ruta también muy bonita de realizar.

¿Qué hacer en Livingstonia?

La zona de Livingstonia, al norte del país, se encuentra situada en una meseta al lado del lago desde donde podrás disfrutar de muchas actividades, entre las que destacamos:

Hacer un recorrido por las cascadas de Manchewe

Las cataratas Manchewe son consideradas las cataratas más altas de Malawi. Se trata de dos saltos de agua que descienden directamente de las montañas por un acantilado, llegando a una altura de 125 metros de altura. No son cascadas con mucho caudal, pero sí muy bonitas de visitar por la belleza de su entorno, ya que se encuentran situadas en medio de la zona boscosa de Livingstonia y con vistas al lago Malawi.

Históricamente, estas cataratas también sirvieron de refugio para la población local, ya que se escondían dentro de las cuevas del acantilado para escapar del tráfico del comercio de esclavos. Hoy en día, puedes encontrar en lo alto de las cataratas y junto al poblado, una pequeña central hidroeléctrica que da energía a los poblados de la zona gracias a la fuerza del agua.

Para llegar, tendrás que pagar una módica entrada de 500MK, es decir, unos 0.40€. El punto de acceso se encuentra situado en la carretera S103, a las afueras de Livingstonia, justo entre el pueblo y el alojamiento de Mushroom Farm.

Allí, encontrarás principalmente dos sitios para disfrutar de los dos saltos de agua de las cataratas. El primero lo tendrás siguiendo, una vez pasado el punto de acceso de madera, el sendero de la derecha que te llevará hasta una pequeña casita (que también hace de bar) donde podrás disfrutar de una vista panorámica de las cataratas más altas del país. Está situado a pocos minutos de la puerta de acceso.

El segundo lugar se encuentra a unos 30-45 minutos de la puerta de acceso. Si quieres, puedes ir con guía o puedes ir solo. Para llegar, justo después de la puerta de acceso, en vez de seguir el sendero de la derecha que te llevaría hacia la casita-bar, debes ir al sendero de la izquierda donde cruzarás el río de la parte alta de una de las cataratas, pasarás junto a la central eléctrica y justo después encontrarás un camino de tierra ancho (que es el que viene de la carretera principal S103). Caminarás unos cientos de metros por este camino, cruzando un puente de madera, hasta que a tu derecha encontrarás un pequeño sendero que te llevará dirección al río. Tendrás que cruzar este río (que es el que forma la cascada) por las piedras hasta llegar a un caminito que irá bajando por el acantilado alejándonos del salto de agua, hasta que en un momento, este camino se divide en dos: uno que aún se aleja más de la cascada, y otro que vuelve hacia ella y que es lo que debes tomar.

Cada vez, irás oyendo el ruido del agua con mayor intensidad hasta que llegues justo dentro de una de las cataratas más altas de Malawi, desde donde podrás tener una vista privilegiada sobre el lago en un entorno muy bonito.

Las cascadas de Manchewe son una de las rutas de senderismo más bonitas a realizar si pasas unos días en Livingstonia. No sólo porque sean las cascadas más altas de Malawi, sino porque se encuentran en un entorno muy bonito formado por su zona forestal y los pequeños asentamientos de casas de la población local de la zona.

Descubrir la misión de Livingstonia, con su iglesia y su hospital

El actual pueblo de Livingstonia fue uno de los asentamientos más importantes por los misioneros anglicanos escoceses que se establecieron en Malawi. Fue fundada en 1894, después de que éstos buscaran establecerse en las montañas para escapar de la situación de malaria que encontraban a orillas de las aguas del río Malawi. Puesto que Livingstonia se encontraba situada a una altura de 1.350 metros sobre el nivel del mar, allí la presencia del mosquito de la malaria era nula y de este modo, pudieron empezar el asentamiento de una de las misiones más importantes de Malaui.

Los misioneros anglicanos se establecieron por primera vez en el actual Malawi en 1875, cuando se asentaron en Cape Maclear (si quieres saber más sobre nuestra experiencia en esta zona del lago, puedes clicar aquí). Esta población antes era conocida como Livingstonia en honor al explorador y misionero David Livingstone, que había fallecido dos años antes, provocando el resurgimiento de las misiones británicas en África Oriental. En 1881, los misioneros se trasladaron más al norte debido al paludismo que había en la zona, hasta que en 1894 llegaron a la meseta de Livingstonia.

Allí, los misioneros establecieron una de las ciudades más importantes del país, con una de las mejores escuelas de la región. Uno de los misioneros más célebres fue Robert Laws, un misionero que estuvo en Livingstonia 52 años, y cuyo objetivo era fundar una universidad en la ciudad. Actualmente, puedes visitar la casa en la que vivió este escocés conocida como The Stone House. Finalmente, después de setenta años de la muerte de este misionero, en 2003 se fundó la Universidad de Livingstonia.

Si haces un recorrido por esta tranquila población de Malawi de unos 7.000 habitantes, podrás visitar su iglesia anglicana, así como también el hospital que fue inaugurado en 1911 y que continúa en funcionamiento, y las tradicionales casas con ladrillos rojos características de la época misionera de los anglicanos escoceses en África del Este.

Conducir por la carretera panorámica que va de Chitimba a Livingstonia

Como hemos comentado, Livingstonia se encuentra situado en una meseta de unos 1.350 metros de altitud. Para llegar, hay una bonita carretera que recomendamos hacer y que sale del lado de las aguas del lago, en la población de Chitimba (a unos 472 metros sobre el nivel del mar), y que sube en una carretera de unos 12 kilómetros de curvas sinuosas que va ganando cada vez más altura. Se conoce con el nombre de Gorodi Road.

Esta carretera, conocida en un primer momento como Longmuir Road en honor a la dama de Aberdeen que fue la principal mecenas de esta construcción, se completó en 1905. Con el uso sólo de herramientas manuales y algo de dinamita para ir agujereando el acantilado, esta carretera tiene hasta 22 curvas que recorren los aproximadamente 600 metros de desnivel que hay entre Chitimba y Livingstonia.

Esta carretera está asfaltada en ciertas curvas y pendientes, pero buena parte es sin asfaltar y con piedras, por lo que la conducción debe ser muy prudente. Mejor ir con un 4×4, y en motocicleta también se puede hacer pero extremando la precaución. De vez en cuando, tendrás que utilizar el claxon para evitar encontrarte algún otro vehículo de cara, ya que a veces el camino es de un solo carril.

Sin embargo, el trayecto es muy recomendable porque dispones de unas vistas del lago fantásticas, pasando por una ruta panorámica muy interesante. Para aquellos que no dispongan de vehículos, también existen pickups o motocicletas que ofrecen el trayecto por 4.000 MKW (unos 3,70 euros aproximadamente).

Visitar la tienda artesanal conocida como Yewo

En Livingstonia, cerca del Mushroom Farm y las cataratas Manchewe, encontrarás una tienda artesanal de joyería sostenible donde trabaja mucha población local. Allí, unos americanos tienen un proyecto muy interesante de creación de joyas, y si visitas la tienda podrás observar todo el proceso creativo de estas artesanías.

Conocida como Yewo (se pronuncia Yay-Woh) que significa gracias con el idioma local, es una visita obligada si estás en la zona para descubrir de primera mano un proyecto muy interesante en el que participa mucha gente local de Livingstonia. Además, podrás comprar unas artesanías muy bonitas como recuerdo de Malawi. Para más información, aquí encontrarás su página web.

Relajarte y disfrutar de las vistas del Mushroom Farm

El Mushroom Farm se encuentra justo antes de llegar a Livingstonia, si vienes de la carretera panorámica de Chitimba. Se trata de un alojamiento ecológico y sostenible, donde podrás dormir en diferentes cabañas camufladas en la zona forestal y situadas justo sobre los acantilados de la meseta y donde podrás disfrutar de unas fantásticas vistas al lago Malawi.

Allí podrás comer platos vegetarianos (no hay carne en su menú), y podrás relajarte mientras lees un libro, meditar en alguna de sus plataformas y disfrutar de la belleza paisajística que encontrarás delante de tus ojos. Uno de los mejores lugares para estar durante tu visita a Livingstonia, y que puedes visitar aunque no te alojes. Desde allí, también puedes realizar diferentes actividades por su entorno. Para más información, aquí tienes su web.

Recorrer el Chombe Plateau

Como hemos comentado, Livingstonia es un pueblo situado en una meseta. Si quieres, puedes recorrer parte de esta meseta conocida como Chombe hasta llegar a alguno de los puntos más altos desde donde podrás disfrutar de una de las mejores vistas de esta zona. ¡Dicen que, aparte del lago y de los pueblos de alrededor, también puedes ver Tanzania y Mozambique! Diferentes alojamientos organizan excursiones a Chombe Plateau, con uno de los miradores más espectaculares sobre el lago Malawi.

¿Dónde dormir en Livingstonia?

En Livingstonia, encontrarás diferentes opciones de alojamiento pero nosotros destacamos:

– Mushroom Farm: Este es el alojamiento emblema para muchos de los viajeros que vienen a descubrir Livingstonia, y que recomendamos al 100%. Tiene unas vistas espectaculares hacia el lago Malawi, y está formado por diferentes cabañas que recomendamos reservar con antelación. Además, dispone de un restaurante vegetariano muy bueno y de diferentes zonas comunes ubicadas con vistas a la zona forestal y al lago.

Se trata de un alojamiento sostenible, por tanto, encontrarás lavabos secos y desde allí, podrás realizar si quieres diferentes actividades por la zona. Además, tienen diferentes proyectos con la comunidad local (donde muchos trabajan en el alojamiento), una zona de huerto y animales. Para más información, puedes mirar su página web aquí.

– Livingstonia Lodges: Este alojamiento se encuentra situado en el centro de Livingstonia, a pocos metros de la casa del misionero Robert Laws y de la iglesia anglicana. Una buena opción si quieres estar en el centro del pueblo, donde podrás disfrutar de cabañas y habitaciones dobles por un precio de 12.000 MKW (unos 11 euros) con desayuno incluido.

Nuestra ruta

DIA 1: Después de haber dormido en la zona central del lago Malawi, en un alojamiento que dispone de un camping a primera línea del lago (Ngala Beach Lodge) y que se encontraba a una hora al sur de Nkhata Bay, hicimos ruta de carretera hacia el norte para llegar al punto más lejano del país de nuestro viaje por Malawi.

La carretera M5 (que va de Nkhotakota a Nkhata Bay) pasa junto al lago, por poblaciones de pescadores y por zonas forestales muy bonitas. Llegamos hasta la población de Mzuzu, una de las más grandes del país, hasta que justo después de pasar esta población nos encontramos en un control policial donde se dieron cuenta de que llevábamos el seguro de la COMESA caducado.

Después de una discusión acalorada con la policía, tuvimos que dar media vuelta a Mzuzu para comprar un nuevo seguro para el vehículo y proseguimos nuestro viaje dirección a Chiweta por la M1. Pasamos el desvío que te lleva hasta el Nyika NP, y antes de llegar a Chiweta bajamos por un puerto de montaña muy bonito, con curvas sinuosas y vistas panorámicas al lago. Una vez llegado a Chiweta, conducimos siguiendo la orilla del lago hasta llegar a Chitimba, desde donde tomamos una carretera secundaria (la S103) de unos 12 kilómetros espectacular, con pendientes muy pronunciadas y terreno de piedras sólo apto para motoristas offroad y vehículos 4×4, hasta llegar a uno de los mejores alojamientos de Malawi: el Mushroom Farm.

Después de un largo trayecto por carretera, con unos paisajes muy bonitos siguiendo la línea del lago y problemas con la policía, llegábamos a nuestro campo base para visitar la zona de Livingstonia. El Mushroom Farm es un ecolodge que dispone de diferentes cabañas en medio del bosque, desde donde puedes ver el lago Malawi desde las alturas. Un lugar muy bonito para descansar después de ese día de ruta, y para compartir experiencias con diferentes viajeros que también se alojaban allí como, por ejemplo, una pareja joven de suizos que estaban pedaleando de Kenia a Sudáfrica en bicicleta, Mark que era un motorista que vivía a caballo de Guatemala y Arizona y que ya habíamos conocido en Monkey Bay, o un matrimonio mayor de Zimbabue que estaban dando la vuelta a la zona este de África con su vehículo.

Fuimos a dormir en las cabañas, relajados, donde oíamos los ruidos de los pájaros y donde descansamos porque al día siguiente tocaba descubrir esta parte histórica del norte de Malawi.

DIA 2: Nos levantamos en un ambiente totalmente bucólico. Nos encontrábamos desayunando en una plataforma de madera con vistas al lago Malawi y a toda la masa forestal que encontrábamos a nuestros pies, en un alojamiento llevado por americanos pero donde los trabajadores mayoritariamente eran población local de la zona que de este modo conseguían un sueldo para a sus familias. Era un alojamiento muy bonito, situado en un entorno ideal para desconectar, relajarte y descansar.

Pero nosotros, aquella mañana nos calzamos las chirucas para subir hacia arriba e ir a visitar las cataratas más altas de Malaui: las Manchewe Falls. Después de caminar por un camino de senderos y saludar a algunos de los trabajadores que estaban construyendo junto al Mushroom Farm, llegamos a la carretera principal por la que habíamos subido el día antes y caminamos hasta llegar a las puertas de entrada de las cataratas.

Situado en las afueras de Livingstonia, el acceso de estas cataratas son una construcción de madera en la que se debe pagar un precio módico de unos 0.40€ por persona que va a parar a la comunidad. Allí, incluso, puedes encontrar a algún niño que como guía se ofrezca para acompañarte a visitar las cataratas. Nosotros fuimos solos para descubrir uno de los saltos de agua más bonitos del país.

Justo después de la entrada, puedes ir por el sendero de la derecha hasta llegar a un pequeño bar que tiene un mirador de las cataratas desde la lejanía, donde puedes observar los dos saltos de agua cayendo por el acantilado. Después de llegar este punto, seguimos nuestra ruta para llegar al otro lado, justo dentro de las aguas de la cascada más alta.

Cruzamos por lo alto de una de las cascadas, y el pequeño arroyo que lo formaba y justo después de pasar una pequeña central hidroeléctrica que da energía a la mayoría de los poblados de la zona, caminamos durante unos 30 minutos hasta llegar literalmente en la cascada más alta de Malawi, desde donde pudimos disfrutar de unas vistas espectaculares, con el sonido esperpéntico del agua justo detrás de nuestras orejas. Nos encontrábamos inmersos en la naturaleza, siendo una nada en medio de la inmensidad y la fuerza del agua.

Después de esta experiencia de senderismo, volvimos por el mismo camino pero, antes de llegar al Mushroom Farm, nos detuvimos en un proyecto donde la población local realiza joyas artesanales y las vende en la tienda, conocida por el nombre de Yewo. Pudimos entrar en el taller, observar todos los procesos en los que convertían las piedras en brazaletes, pendientes y collares, y charlar con algunos de sus trabajadores.

Finalmente, después de una mañana intensa de senderismo, llegamos de nuevo al Mushroom Farm donde pudimos ducharnos y descansar. El entorno de este sitio es realmente especial, y después de una tarde relajada donde volvimos a la tienda Yewo para hacer algunas compras y hablar con otros viajeros que se encontraban en el alojamiento, hicimos un hermosa cena y disfrutamos de unas vistas muy bonitas del lago desde las alturas de la meseta de Livingstonia.

DIA 3: Hoy, después de dos noches en el Mushroom Farm, tocaba empaquetar las maletas para seguir haciendo ruta con Susanna por Malaui, un país que había pisado hacía ya 27 años. Haríamos el recorrido a la inversa para llegar hasta Nkhata Bay donde, de madrugada, tomaríamos una barca que nos llevaría hasta Likoma Island, nuestra siguiente parada del viaje.

Antes, con el coche fuimos hasta el centro histórico de Livingstonia, uno de los primeros pueblos misioneros que fundaron los anglicanos escoceses cuando se escapaban del mosquito de la malaria. Al estar en una zona de elevada altitud, allí la supervivencia del mosquito era más complicada que junto a la orilla de las aguas del lago. Hicimos una infusión en una tienda de productos locales junto a la iglesia que fue el centro neurálgico de la villa de Livingstonia, y aprovechamos también para pasar junto al hospital, otro de los emblemas de este pueblo histórico y misionero de Malawi.

Una vez hecha esta parada, conducimos por el interior (no volvimos a hacer la carretera panorámica que bajaba hasta Chitimba) por una carretera en muy buen estado y que pasaba por diferentes pueblos rurales que estaban situados en un altiplano que limitaba con el Nyika National Park, hasta llegar al cruce del río South Rukuru, desde donde volvimos a reengancharnos a la carretera principal M1, a la altura de Chisokowo.

Desde allí, teníamos unas 2 horas de ruta hacia el sur hasta llegar a Nkhata Bay, donde dejaríamos el coche para navegar de madrugada hasta Likoma Island, nuestro siguiente destino.