Angola es un país que vivió una guerra civil muy larga debido al proceso de independencia del país en el año 1975, y que no terminó hasta el año 2002. Esta guerra fue fruto de la presencia de 3 partidos que querían encabezar el gobierno después de dejar de formar parte de Portugal. De hecho, Angola fue la última colonia portuguesa en independizarse. A continuación, puesto que creemos que para conocer un país es también importante conocer su historia, resumiremos de una forma muy breve la historia de Angola.

Angola fue una colonia portuguesa durante muchos años. Los portugueses fueron de los primeros en explorar toda la costa africana, queriendo unir Europa con el comercio de las indias. Uno de sus exploradores más conocidos fue Bartolome Dias, que en el siglo XV logró dar la vuelta a buena parte del continente africano.

De hecho, los portugueses fueron uno de los colonizadores más importantes de África, aunque con el paso del tiempo perdieron su hegemonía en manos de los árabes, ingleses y franceses. Controlaban, por ejemplo, la ciudad de Mombasa y también buena parte de las islas africanas del océano Atlántico como el actual Sao Tome e Principe, Cabo Verde o Azores. Además, la actual Angola y Mozambique también formaban parte de Portugal y eran conocidos como África Occidental Portuguesa y África Oriental Portuguesa, respectivamente.

Actualmente en Angola, la influencia de la colonia portuguesa está muy presente. No sólo en que el portugués sea el idioma oficial, sino también en la arquitectura de algunas de sus ciudades como Benguela (si quieres saber más sobre la costa de Angola puedes clicar aquí), el tráfico de esclavos del interior del país o con el envío de miles de trabajadores para que trabajaran en la pesca, uno de los sectores que hoy en día todavía es uno de los más importantes del país.

Antes de la colonización portuguesa, en Angola había distintos pueblos organizados con reinos. Los más conocidos eran el Reino del Congo, cuyo capital era Mbanza Kongo, situado en el norte del país; el reino de Ndongo-Ngola, situado en el centro del país y que estaba gobernado por el pueblo mbundu; el reino de Benguela, situado en la zona de la meseta de Bié; y los diferentes grupos tribales que vivían en el sur del país (si quieres saber más, puedes clicar aquí); entre otros. Cuando los portugueses llegaron, principalmente tenían dos objetivos: establecer relaciones comerciales con todos aquellos reinos por el tráfico de esclavos; e intentar evangelizar a toda la población autóctona convirtiéndola al catolicismo y creando diferentes misiones a lo largo de todo el territorio. Angola se considera uno de los primeros países colonizados (año 1575) y desde Luanda empezaron a establecer un protectorado que cada vez ocupaba más territorio de la franja costera.

Durante ese tiempo, uno de los episodios más conocidos fue el que protagonizó la reina Nzinga de Ndongo, una de las mujeres más célebres e importantes del continente africano por la lucha que impulsó contra los colonizadores portugueses. El pueblo mbundu resistió a los ataques de Portugal y logró cierta soberanía gracias a los acuerdos firmados por la reina a principios del siglo XVII que, finalmente, aceptó bautizarse al cristianismo y su nombre pasó a ser Ana de Souza. Si quieres saber más sobre la historia del pueblo mbundu en Pungo Andongo, puedes leerla en este artículo que hemos hecho sobre la región de Malanje.

Hasta el siglo XX, Angola formaba parte de la colonia portuguesa donde éstos hacían tratados con los diferentes reinos para institucionalizar la esclavitud: enviaban esclavos principalmente hacia Brasil, y así éste se convirtió en el principal negocio de Portugal en Angola hasta aproximadamente el proceso de independencia. Los datos dicen que aproximadamente 4 millones de esclavos fueron exportados desde ese país africano.

Cuando el Congo Belga logró su independencia en 1960, la expansión y las ganas de nueva soberanía también llegaron hasta el norte de Angola donde estaba la provincia del Congo portugués. Allí, surgieron diferentes matanzas contra colonos (y también contra aquella población negra que era fiel a los blancos) y el entonces presidente de la colonia, Marcelo Caetano, planteó en 1968 la opción de dar la independencia al país, dejando las decisiones del gobierno pero a los colonos. A partir de entonces, surgen 3 movimientos independentistas distintos y que explican buena parte de la guerra civil del país. Estos partidos eran el MPLA (Movimiento Popular por la Liberación de Angola), la UNITA (Unión Nacional por la Independencia Total de Angola) y el FNLA (Frente Nacional por la Liberación de Angola).

El MPLA fue creado por Agostinho Neto y se encontraba en la zona de Luanda. Recibía apoyo de todo el blog comunista, es decir, Cuba y URSS. UNITA fue fundado en el centro del país por Jonas Savimbi, una persona conocida como el eterno rebelde y que era amigo de los conservadores americanos (incluso fue a la Casablanca a reunirse con Ronald Reagan). Y, finalmente, el FNLA fue fundado por Holden Roberto, un partido de la etnia Bakongo (norte del país) y que tuvo el apoyo también de los americanos y el régimen de Mobutu Sese Seko de Zaire. Se unieron a la UNITA para luchar contra el poder del MPLA.

En 1975 se firmó la independencia de Angola entre el gobierno autónomo portugués y estos 3 partidos. Se había logrado el objetivo, pero ahora el problema era saber quién gobernaría el país y ahí empezaron todas las tensiones. El MPLA expulsó al FNLA de Luanda y se adelantó para conseguir el poder (los portugueses dijeron que darían el poder a quien consiguiera dominar la ciudad), mientras UNITA se mantenía al margen de los enfrentamientos de la capital. Pero, en septiembre de 1975, el MPLA, con diferentes combates en todo el país, ya controlaba 12 de las 15 provincias de Angola.

Entonces, UNITA y FNLA se unieron para contraatacar al partido de Neto. Los primeros lo hicieron desde el sur con la entrada de tropas de Suráfrica, y los segundos desde el norte. Consiguieron hacer retroceder a MPLA, y los portugueses viendo cómo estaba quedando el país decidieron marcharse y Neto declaró la independencia de Angola el 11 de noviembre proclamándose presidente del país, en un momento donde en Angola reinaba el caos y se encontraba de lleno en una guerra civil. El MPLA iba perdiendo terreno, hasta que a finales de 1975 llegaron los primeros soldados cubanos y también el armamento soviético para actuar contra los otros dos grupos independentistas. La guerra siguió principalmente entre MPLA y UNITA, pero esta batalla también iba más allá, y desde el extranjero se veía como una guerra entre los dos bloques de la Guerra Fría: los comunistas y los capitalistas.

Angola se convirtió en un gobierno comunista de partido único de 1975 a 1992. Primero, con la presidencia de Agostinho Neto, y después de su muerte en 1979, con la presidencia de José Eduardo dos Santos. Durante todo ese tiempo de guerra, MPLA tenía una estrategia muy inteligente. Apoyó a los separatistas de Katanga que querían la independencia de Zaire y, de este modo, logró que Zaire dejara de apoyar a UNITA (y ellos, en consecuencia, también a los separatistas). Y, hicieron lo mismo, con el SWAPO, un movimiento independentista de Namibia, que obligó a llegar un pacto con África del Sur para que dejaran de apoyar a UNITA.

En 1991, después de 16 años de guerra civil, el MPLA y UNITA llegaron a un acuerdo de paz. Angola dejaría de ser un gobierno de un único partido, y se convertiría en un estado multi partidista. En las primeras elecciones que se hicieron, MPLA ganó pero UNITA no aceptó los resultados, los declaró como fraude y, por tanto, el conflicto continuó.

En 1994 se llegó a un principio de acuerdo de paz entre los dos partidos (conocido como el Protocolo de Lusaka) donde se aceptaba la integración de ex insurgentes de UNITA en el gobierno. Sin embargo, las desavenencias continuaron a lo largo de los años hasta el 2002, que es cuando muere tiroteado Savimbi, el líder político de UNITA. Desde entonces, el partido decide abandonar la lucha armada y establecerse como principal partido de la oposición.

Estos casi 30 años de guerra civil han dejado consecuencias desastrosas para el país. En 2002 dejaron un país sometido a la pobreza, con graves crisis alimentarias; así como una gran presencia de campos minados debido al impacto de la guerra civil. Hoy en día, el poder sigue estando bajo manos del MPLA con el presidente João Lourenço. A partir de las riquezas del petróleo, la pesca, los diamantes o la madera, Angola es uno de los países africanos con más expectativas de futuro. Sin embargo, dentro del país todavía se encuentran muchas desigualdades económicas que si no se intentan paliar en breve, pueden enviar al país a una grave crisis social.